A la hora de viajar con niños a Marruecos, debemos seguir una serie de consejos fundamentales, no porque Marruecos sea un país peligroso para los niños, sino que algunas zonas pueden ser tremendamente calurosas y los pequeños son los que más problemas tienen para asimilar el calor durante los viajes. En primer lugar la ropa de los pequeños debe ser muy fresca, de algodón y siempre larga, que cubra las piernas y los brazos, para que así pueda mantener el cuerpo a una temperatura más agradable y para que los niños estén bien.

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Además de la ropa larga, debemos tener preparado agua abundante para los pequeños, que nunca deberá salir de otro lugar que no sea de una botella, ya que el agua contiene microorganismos que son perjudiciales para los niños y los mayores que no viven en Marruecos y que no están acostumbrados a beber este agua. Los niños son mucho más sensibles a estos cambios de agua y es fundamental darle de beber agua embotellada siempre, sin excepción.

Además del agua, la ropa, es importante una gorra, para que la cabeza de los más pequeños no se caliente demasiado y puedan tener luego dolor de cabeza, sobre todo si son extremadamente pequeños, de muy pocos años. El resto de consejos son los que se pueden aplicar también a los mayores, teniendo más cuidado con los niños, pero tampoco extremando las precauciones, ya que Marruecos es un país estupendo, también para los niños, siempre cuidando de la temperatura, que no sea extrema.

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